Bajo la chapa pongo una pletina sobre cuyo ángulo se pliega la chapa.
Sobre la chapa y desplazado hacia atrás respecto a la pletina inferior, monto un ángulo para sujetar la chapa.
En la foto se ve el final del plegado, para afilar el pliegue a un radio pequeño con golpes ligeros de martillo.
Aunque el resultado es bastante bueno, la chapa quedó abombada, de manera que no estaba plana, y tenía excesivas marcas de martillo.
Tras descartarla, hice varias pruebas para intentar enderezarla, con calor, y tratando de contraer la chapa en los bordes, pero sin mucho resultado, en parte por no tener una maza de plástico o de madera.
al final traté de hacer unos cortes y soldarlos, pero tampoco dio resultado, porque la chapa es muy fina y estoy soldando con hilo tubular.
Arriba se puede ve el piso original.